Caracas. – Un llamado urgente a proteger a los migrantes venezolanos que se encuentran en peligro de deportación hicieron este miércoles varias organizaciones venezolanas dedicadas a la protección de los exiliados.
Desde un evento celebrado en la ciudad de Doral (Florida, EE. UU.), la organización de Venezolanos Políticos Perseguidos en el Exilio (VEPPEX), Asociación Multicultural de Activistas Voz y Expresión Amavex), All For Venezuela y el Programa de Ayuda Humanitaria Go Human Rights, emitieron un comunicado instando a organismos internacionales a actuar ante los riesgos que enfrentan muchos ciudadanos venezolanos de bien, que en estos momentos podrían ser injustamente deportados por las autoridades estadounidenses hacia El Salvador.
«Hoy, desde el exilio, alzamos nuestra voz ante una crisis que no puede seguir siendo ignorada. Nos encontramos en un momento crítico que exige acción inmediata y decidida», indica inicialmente el comunicado.
Los organismos denuncian «la intensificación de la represión en Venezuela, donde el régimen ha arremetido incluso contra las últimas voces independientes de la sociedad civil, como lo evidencian los recientes ataques a organizaciones defensoras de derechos humanos como PROVEA y Foro Penal. En Venezuela no existen garantías mínimas de libertad, justicia ni seguridad».
Por su parte, el presidente de Veppex, José Antonio Colina, denunció el impacto negativo, que incluso produce esta persecución sobre los migrantes venezolanos, en la economía estadounidense.
«El acoso los obliga a vivir bajo las sombras, y por ello, muchos dejan de trabajar, de producir y de pagar. Eso repercute negativamente en la economía estadounidense, y quien en la actual administración pensó en tomar esta medida, sabía el daño que esto causaría», advirtió.
Las organizaciones alertaron sobre las deportaciones que la justicia estadounidense efectúa hacia El Salvador, entre los cuales figuran muchos migrantes venezolanos, país que ha sido calificado por ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados), como «una nación donde se violan sistemáticamente los derechos humanos».
La misiva destaca, que «los venezolanos son personas refugiadas y no removibles, según el derecho internacional. Cualquier medida de expulsión o deportación atenta contra los principios fundamentales del sistema de protección internacional».
Por ello, exigen, y ante las autoridades migratorias de Estados Unidos:
– Respetar el principio de no devolución (non-refoulement).
– Proteger a las familias venezolanas mediante la aprobación del“Venezuela TPS Act of 2025”.
– Garantizar el debido proceso y acceso a la justicia para quienes enfrentanprocesos migratorios.
También, piden a los organismos internacionales que defienden los Derechos Humanos ofrecer una respuesta «hemisférica y coordinada» ante la situación de los venezolanos, porque se han visto obligados a protagonizar «el segundo mayor éxodo de desplazamiento forzado en el mundo», y por ello, no pueden ser abandonados a su suerte.
Las organizaciones también hicieron una seria advertencia en la misiva: «La angustia, el miedo y la incertidumbre están afectando gravemente la salud mental de miles de niños y adolescentes migrantes. Exigimos atención urgente y políticas migratorias que no vulneren el bienestar emocional de nuestra niñez».
Finalmente, piden no tratar con indiferencia ni con medidas tibias a la «migración forzada venezolana», ya que están en juego miles de vidas humanas.