Esta semana, el director de Reporteros sin Fronteras, Thibaut Bruttin, ha asegurado que Milei le está haciendo «mucho daño» a la prensa con su discurso, y lo ha catalogado como un «enemigo» de la prensa, por su lenguaje cuando se dirige a ellos y por desmantelar la agencia estatal de noticias argentina.
Como se ha señalado, sus argumentos para arremeter en contra de Milei son que usa un lenguaje que «incita al odio», en referencia a las formas en que comunica el mensaje. No obstante, es curioso que no repare en sus acciones al momento de criticarlo, puesto que Milei en ningún momento ha censurado a nadie.
De hecho, más que no censurar a nadie, el gobierno de Milei ha permitido el acceso libre a la prensa y busca ampliar la participación de medios, a diferencia de regímenes anteriores o actuales en otros países, como Venezuela, a los cuales Bruttin no se ha dignado a críticar.
En este marco, por favorecer una propaganda mentirosa, que busca tergiversar la realidad, y por la doble moral de criticar falsas persecuciones a la prensa en Argentina, pero no hacer lo propio contra regímenes que la misma región, Thibaut Bruttin es elegido como el Borrego de la Semana.