Caracas. – Las detenciones incomunicadas y los aislamientos de rehenes que ejecuta el narcorégimen chavista pueden ser considerados como crímenes de lesa humanidad, según lo advirtió este miércoles la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos, de la ONU sobre Venezuela.
La presidente de la Misión, Marta Valiñas, alertó durante la sesión celebrada en la ONU, que «mantener a personas opositoras en condiciones de aislamiento e incomunicación es una práctica perversa e ilegal que puede constituir un crimen internacional».
Agregó que la tortura y la desaparición forzada de personas son crímenes de lesa humanidad cuando se cometen como parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil y con conocimiento de dicho ataque.
Asimismo, indicó que organismos represivos como la GNB, DGCIM, SEBIN y la PNB son «son responsables de llevar a cabo esta práctica», siempre con el respaldo del Ministerio Público de la Narcotiranía.
También, Valiñas denunció que «la falta de funcionamiento eficaz de los mecanismos de protección legal es alarmante y confirma la ausencia de un verdadero Estado de derecho».
A juicio de la Misión, «esta ausencia de protección está ejemplificada por la ineficiencia de la institución del habeas corpus, un mecanismo de protección fundamental contra las detenciones arbitrarias, las desapariciones forzadas y el riesgo de torturas».
También, el experto de la Misión Francisco Cox precisó que tales situaciones están ocurriendo en Venezuela “como parte del crimen de lesa humanidad, de persecución fundada en motivos políticos”.
La Misión afirmó haber investigado y corroborado al menos 20 casos en los que los recursos de habeas corpus o no fueron recibidos, o fueron rechazados o no obtuvieron respuesta.
“La indiferencia, la resistencia o la negativa del aparato judicial a recibir y tramitar habeas corpus es un grave incumplimiento de los deberes de sus funcionarios y supone un acto de complicidad”, opinó por su parte Patricia Tappatá, experta y miembro de la misión.
Finalmente, y tal como lo hizo la oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Volker Türk, la Misión exigió a la tiranía chavista liberar, de inmediato, a todos los rehenes políticos que se encuentran en el país.