Caracas. – Una mafia del narcoachavismo dedicada al tráfico de niños y adolescentes desde Venezuela, y la cual está capitaneada por un hijo de Cilia Flores, fue denunciada este pasado martes por el exfiscal chavista, Zair Mundaray.
El exalto funcionario del narcorégimen, ahora en el exilio, ofreció una entrevista a la periodista Jessica Vallenilla en el medio EVTV, en la cual explicó que se trata de una red que inició con los llamados «enchufados» al sistema criminal chavista.
En este sentido, señaló que es un mecanismo en el cual se usa todo el sistema de protección y judiciales para sustraer a niños, niñas y adolescentes de sus familias de origen. Y los familiares que se han atrevido a denunciar sus casos, han sido amedrentados y hasta encarcelados.
«Muchas de las víctimas temen hablar porque han sido detenidas personas por denunciar y les atribuyen falsos hechos como violencia hacia los niños, violencia sexual y los mantienen detenidos. Hay una situación muy grave», dijo Mundaray.
Explicó que esta aberración se originó, a raíz de las disputas por la patria potestad que tuvieron matrimonios vinculados a la tiranía. Alguno de los dos involucrados en la demanda lograba quitarle los hijos al otro, debido a que tenía mayor padrinazgo dentro del régimen y, por ende, mayor poder.
Igualmente, Mundaray indicó que en los casos que se han investigado suelen aparecer los mismos nombres de los funcionarios implicados en esta práctica, pero el más relevante es el de Walter Gaviria Flores, un magistrado muy reconocido dentro del chavismo y, además, hijo de Cilia Flores, quien termina avalando los procedimientos.
«Las decisiones se toman en la sala social y las avala el magistrado Walter Gaviria Flores, que es un magistrado muy importante y que es familia de Cilia Flores y orden a los jueces como actuar en estos casos», indicó.
Hay que recorda, que Gaviria Flores ha sido sancionado y acusado de participar en operaciones de narcotráfico por la justicia estadounidense. De hecho, la ONG Red Global ha indicado en un informe sobre el perfil de este funcionario de la tiranía, que las denuncias en su contra lo han colocado «bajo escrutinio internacional, convirtiéndolo en una figura controversial dentro del entramado político-familiar que rodea a la presidencia (narcorégimen) venezolana».
También, precisó que hay varias modalidades, una con una denuncia en la que usan el sistema de protección, la otra es en centros de salud, les dicen que el infante murió y nunca les entregan el cadáver. Además, usan el sistema judicial para privar de la patria potestad a los padres y sacar al niño del país, donde le pierden el rastro.
«Estas modalidades nos demuestran, con casos concretos y víctimas concretas, que hay una gran red de tráficos de niños en Venezuela, que a cambio de dinero permiten que esto ocurra», denunció.
El exfiscal general chavista dijo que él, junto a un equipo de abogados que investigan las andanzas de esta mafia, han documentado 198 casos. Lo más grave es que los niños víctimas de este tráfico, son vendidos por montos que oscilan entre los 40.000 dólares y los 200.000 dólares.