EE. UU. ha insistido este miércoles en su demanda de que los aliados de la OTAN dediquen un 5% de su PIB a inversión en Defensa y lleguen a este acuerdo en la próxima cumbre de líderes en La Haya, tras recalcar que este listón no es una «sugerencia» sino un «punto de partida» para garantizar la seguridad de la alianza atlántica y que interpela a todos los países, «incluidos nuestros amigos de España».
«Cada aliado debe comprometerse a invertir al menos el 5% del PIB en Defensa y seguridad a partir de ahora. Esto no es una sugerencia, es un punto de partida», ha argumentado el embajador de EE. UU. ante la OTAN, Matthew Whitaker, en declaraciones previas a la reunión de ministros de Defensa aliados en Bruselas que acordará los nuevos objetivos de capacidades militares para garantizar la seguridad y disuasión de la OTAN y que irán de la mano del nuevo compromiso de gasto militar que el bloque acordará en la próxima cumbre de La Haya.
De esta forma, Whitaker ha apuntado que las «amenazas en aumento» a las que se enfrenta la OTAN obligan a que los socios trasatlánticos den un paso adelante y eleven el listón de gasto, que hasta ahora se sitúa en el 2% y que hasta el presente año cumplían 23 de los 32 aliados.
«Nuestros adversarios no están esperando a que nos rearmemos o estemos preparados para que ellos hagan el primer movimiento. Preferiríamos que nuestros aliados se movilizaran urgentemente para alcanzar el 5%», ha argumentado el representante estadounidense ante la organización militar.
Respecto a la oposición de algunos aliados como España, que rechaza hablar de porcentajes al aducir que el nuevo objetivo de gasto sobre la mesa es una cifra que obedece solo a una cuestión política, el embajador estadounidense ha evitado entrar en polémicas y se ha limitado a decir que la cumbre de La Haya será el escenario para que «todos» los aliados se sumen al compromiso del 5%.